Podemos decir que fue la más buscada. Carlos, mi marido, se pasó muchas horas para poder encontrarla. Yo me empeñé en que no era el momento, pero después del nacimiento de nuestro hijo Pelayo y durante la baja de maternidad, me convenció para ir a visitarla. Y ahí fue cuando surgió nuestro primer encuentro. Estoy convencida de que fue el momento perfecto. Recuerdo entrar por el portón de madera y casi viajar al futuro. Nos imaginé ahí siendo felices. Y desde entonces sabíamos que la habíamos encontrado. De ahí su nombre.

Viajar forma parte de nuestra vida, no concebimos hacernos viejitos y quedarnos quietos. En uno de nuestros viajes, nos dimos cuenta de que el destino no importaba tanto como la experiencia de la escapada.

Apostamos por el proyecto con la finalidad de encontrarnos con todos los que queremos. Nos gusta compartir con los nuestros: gastronomía, libros, rutas, recolecta… Y también con los que aún no conocemos pero vienen con las ganas de desconectar, celebrar, inspirarse o simplemente estar.

La Encontrada no es solo una casa. Es un lugar que elegimos para vivir con intención, para celebrar la vida en sus formas más sencillas y más bonitas.
Bienvenidos a este rincón en el que todo se da sin prisa. Ojalá aquí también tú sientas que has encontrado algo.